Globalización no es Desarrollo
El Desarrollo
Mucho se habla del desarrollo en términos de crecimiento económico, modernización y progreso material y social para mejorar la calidad de vida de los llamados paises subdesarrollados, sin embargo, para algunos autores latinoamericanos el Desarrollo ha sido una forma de promover la difusión del capitalismo fortaleciendo sus influencias políticas y económicas en los pueblos coloniales y neocoloniales.
Se califica al Desarrollo, como una ideología que promovió la creencia del progreso rápido y simultáneo para las naciones, sobre la base de la cooperación internacional y la asistencia de las potencias industriales.
Desarrollo y Globalización
Haciendo un paralelo o comparación entre el Desarrollo y la globalización, y sosteniendo que, ésta ultima participa simplemente del supuesto del aumento del bienestar general, como parte de la difusión mundial del capitalismo, en donde el proceso de homogenización del mundo debe ser aceptado por las naciones sin restricciones ni reservas pues, este es inevitable. Llegamos a la conclusión que así como el desarrollo, la globalización induce a los países del Tercer mundo a la aceptación del capitalismo mediante el acatamiento incondicional de las fuerzas de los mercados nacionales e internacionales, en síntesis la globalización plantea una versión extrema de liberalismo económico, a diferencia del Desarrollo que tiene un contenido ético, cual es, la búsqueda del bienestar social y la mejora de la calidad de vida para el pueblo.
Desarrollo una utopía para los países del Tercer Mundo
Siguiendo a algunos autores una visión del Desarrollo como la plantearon, de inmediato o como una forma natural y progresiva mediante tesis de reproducción capitalista a través de la apertura y endiosamiento del mercado que, de alguna forma, nos iba a procurar bienestar social y/o crecimiento, es una utopía para los países del Tercer Mundo.
Coincidentemente a mi entender, y por la realidad que viven los países latinoamericanos, el tema de la Globalización y el Desarrollo suscita la misma opinión; no hay Desarrollo, el perfeccionamiento de la nueva terminología de países en desarrollo ha pasado a ser un mito.
Durante la Guerra Fría, el mito del desarrollo se expresaba en dos modelos rivales, el comunista y el capitalista, luego del colapso del comunismo, emerge un capitalismo global que va hasta el extremo de convertir el mercado en una suerte de ley natural suprema, sin ética, que prescinde de los aspectos sociales, culturales y ecológicos y a la que hay que someterse con resignación porque es inevitable.
La globalización que promete reproducir sociedades capitalistas modernas en los países subdesarrollados, no trae la prosperidad esperada. Podemos decir por el contrario, que lo que se esta reproduciendo es la pobreza y la exclusión de grandes sectores de la población mundial de la economía global que no cuentan con los ingresos económicos necesarios para entrar en la ruleta del mercado.
Podemos decir que hasta ahora, la Globalización no trae consigo el tan ansiado desarrollo, ni el progreso, ni el llamado bienestar social. Por el contrario el nuevo poder de las empresas transnacionales impulsa sin tregua la globalización abriendo mercados y haciendo importar más a los países pobres, aumentando su déficit externo y su deuda, sin efectuar inversiones productivas que permitan modernizar a estos países para que puedan competir en la economía global del siglo XXI.
Otro de los aspectos importantes que resaltar, es la posición de que los países subdesarrollados no tendrán desarrollo: si no existe una vigorosa política social del Estado, yo agregaría que no solo social, sino productiva y tecnológica. Si no, recordemos lo que ha sucedido con los llamados programas sociales en el Perú, (Programas alimentarios, asistencialistas) que han fracasado en la lucha contra la pobreza, el hambre y la desnutrición.
Lo que se requiere es la intervención activa del Estado mediante un proyecto país que incluya no solo los temas sociales o políticos, sino una visión económica de inversiones productivas, manufactura, infraestructura básica (vial, fluvial etc), inversión en tecnología, educación, investigación, impulsando las inversiones productivas descentralizadas, estableciendo relaciones comerciales más ventajosas utilizando las potencialidades de los recursos naturales, humanos y sociales del país, apostando por proyectos a mediano y largo plazo sin arriesgar el futuro por aparentes ventajas inmediatas.
Hoy, el porvenir de los países como el nuestro depende cada vez más del conocimiento y del acceso a la información científico-tecnológica pero aplicada a nuestra realidad y con nuestros propios recursos, obtener mejores condiciones de competencia en el mercado para lograr entrar al camino del desarrollo. Nuestras economías pueden mantenerse por decenios dentro de una situación estabilizada pero sin desarrollo, inclusive puede existir cierto crecimiento pero eso no garantiza que desaparezca o que disminuya la pobreza nacional.
Frente a esta realidad nada halagüeña, no puedo dejar de preguntarme como calificar la esperanza en que los países subdesarrollados logren alcanzar algún día el desarrollo, si como utopía, mito o locura, creo que la utopía mas grande, es pensar que el capitalismo globalizado permita alguna vez que los países que solo le sirven de mercado, puedan competir en igualdad de condiciones....
Mucho se habla del desarrollo en términos de crecimiento económico, modernización y progreso material y social para mejorar la calidad de vida de los llamados paises subdesarrollados, sin embargo, para algunos autores latinoamericanos el Desarrollo ha sido una forma de promover la difusión del capitalismo fortaleciendo sus influencias políticas y económicas en los pueblos coloniales y neocoloniales.
Se califica al Desarrollo, como una ideología que promovió la creencia del progreso rápido y simultáneo para las naciones, sobre la base de la cooperación internacional y la asistencia de las potencias industriales.
Desarrollo y Globalización
Haciendo un paralelo o comparación entre el Desarrollo y la globalización, y sosteniendo que, ésta ultima participa simplemente del supuesto del aumento del bienestar general, como parte de la difusión mundial del capitalismo, en donde el proceso de homogenización del mundo debe ser aceptado por las naciones sin restricciones ni reservas pues, este es inevitable. Llegamos a la conclusión que así como el desarrollo, la globalización induce a los países del Tercer mundo a la aceptación del capitalismo mediante el acatamiento incondicional de las fuerzas de los mercados nacionales e internacionales, en síntesis la globalización plantea una versión extrema de liberalismo económico, a diferencia del Desarrollo que tiene un contenido ético, cual es, la búsqueda del bienestar social y la mejora de la calidad de vida para el pueblo.
Desarrollo una utopía para los países del Tercer Mundo
Siguiendo a algunos autores una visión del Desarrollo como la plantearon, de inmediato o como una forma natural y progresiva mediante tesis de reproducción capitalista a través de la apertura y endiosamiento del mercado que, de alguna forma, nos iba a procurar bienestar social y/o crecimiento, es una utopía para los países del Tercer Mundo.
Coincidentemente a mi entender, y por la realidad que viven los países latinoamericanos, el tema de la Globalización y el Desarrollo suscita la misma opinión; no hay Desarrollo, el perfeccionamiento de la nueva terminología de países en desarrollo ha pasado a ser un mito.
Durante la Guerra Fría, el mito del desarrollo se expresaba en dos modelos rivales, el comunista y el capitalista, luego del colapso del comunismo, emerge un capitalismo global que va hasta el extremo de convertir el mercado en una suerte de ley natural suprema, sin ética, que prescinde de los aspectos sociales, culturales y ecológicos y a la que hay que someterse con resignación porque es inevitable.
La globalización que promete reproducir sociedades capitalistas modernas en los países subdesarrollados, no trae la prosperidad esperada. Podemos decir por el contrario, que lo que se esta reproduciendo es la pobreza y la exclusión de grandes sectores de la población mundial de la economía global que no cuentan con los ingresos económicos necesarios para entrar en la ruleta del mercado.
Podemos decir que hasta ahora, la Globalización no trae consigo el tan ansiado desarrollo, ni el progreso, ni el llamado bienestar social. Por el contrario el nuevo poder de las empresas transnacionales impulsa sin tregua la globalización abriendo mercados y haciendo importar más a los países pobres, aumentando su déficit externo y su deuda, sin efectuar inversiones productivas que permitan modernizar a estos países para que puedan competir en la economía global del siglo XXI.
Otro de los aspectos importantes que resaltar, es la posición de que los países subdesarrollados no tendrán desarrollo: si no existe una vigorosa política social del Estado, yo agregaría que no solo social, sino productiva y tecnológica. Si no, recordemos lo que ha sucedido con los llamados programas sociales en el Perú, (Programas alimentarios, asistencialistas) que han fracasado en la lucha contra la pobreza, el hambre y la desnutrición.
Lo que se requiere es la intervención activa del Estado mediante un proyecto país que incluya no solo los temas sociales o políticos, sino una visión económica de inversiones productivas, manufactura, infraestructura básica (vial, fluvial etc), inversión en tecnología, educación, investigación, impulsando las inversiones productivas descentralizadas, estableciendo relaciones comerciales más ventajosas utilizando las potencialidades de los recursos naturales, humanos y sociales del país, apostando por proyectos a mediano y largo plazo sin arriesgar el futuro por aparentes ventajas inmediatas.
Hoy, el porvenir de los países como el nuestro depende cada vez más del conocimiento y del acceso a la información científico-tecnológica pero aplicada a nuestra realidad y con nuestros propios recursos, obtener mejores condiciones de competencia en el mercado para lograr entrar al camino del desarrollo. Nuestras economías pueden mantenerse por decenios dentro de una situación estabilizada pero sin desarrollo, inclusive puede existir cierto crecimiento pero eso no garantiza que desaparezca o que disminuya la pobreza nacional.
Frente a esta realidad nada halagüeña, no puedo dejar de preguntarme como calificar la esperanza en que los países subdesarrollados logren alcanzar algún día el desarrollo, si como utopía, mito o locura, creo que la utopía mas grande, es pensar que el capitalismo globalizado permita alguna vez que los países que solo le sirven de mercado, puedan competir en igualdad de condiciones....
3 comentarios
Anónimo -
Cristina Pérez -
En mi blog os ofrezco una posibilidad para el desarrollo.
Saludos,
http://cristinaperezvazquez.blogspot.com/
zenia -
Coincido contigo en que la globalización no es desarrollo.Hay que globalizar la equidad y el amor al ser humano. En la página
http://imaginados.blogia.com
se cuentan historias conmovedoras de cómo se globaliza ese amor. Nos vemos.